¿Qué es el entrenamiento en altura?

Seguro que habéis oído hablar muchas veces, como la palabra dice el entrenamiento en altura es un tipo de preparación física que de desarrolla a más de 2200 metros de altitud sobre el nivel del mar, y cuya duración ronda las 2-3 semanas. Después de este proceso, se produce una mejora del rendimiento cuando se compite al nivel del mar

¿Por qué hay atletas que recurren a este tipo de entrenamiento?

Este tipo de entrenamiento produce una serie de adaptaciones muy específicas por tanto, la población a la que va dirigida es principalmente deportistas profesionales o de élite.

Al entrenar el altura nos encontramos en una situación de menos porcentaje de oxígeno, en este estado, el organismo produce una proteína llamada eritropoyetina (EPO) que se crea en el riñón y aumenta la producción de  eritrocitos (que suben el volumen de plasma y aumentan los glóbulos rojos) este aumento de EPO produce un aumento de la concentración de hemoglobina en sangre. Cuando la hemoglobina aumenta, se produce a su vez un aumento del VO2 Máx y por ende un aumento de la resistencia aeróbica.

Se estima que si se aumenta un 10% la hemoglobina se puede aumentar hasta un 7% el VO2 máx.

Pero no vale cualquier protocolo de entrenamiento, para amentar significativamente la eritropoyetina  se debería de entrenar en hipoxia sobre 3000-2500 metros de altura y al menos estar entre 2-3 horas a esta altura durante un par de semanas. Tras ello, beneficios a nivel del mar serán efectivos a partir de los 10 días y durante 2-3 semanas máximo.

Otros beneficios que se han encontrado a nivel muscular son:

• Inducción a la angiogénesis (aumenta los capilares en el músculo)
• Aumento la capacidad oxidativa de las mitocondrias
• Aumento de las fibras tipo I y disminución de las tipo II
• Aumento de la capacidad mitocondrial en el músculo

Como podéis observar se pueden conseguir grandes beneficios cuando se vive y entrena en altura, quizás no es algo que tengamos al alcance de nuestra mano, sobre todo si no somos profesionales, pero…¡quién sabe, siempre podemos probar a hacer una buena marca después de unas vacaciones en el Machu Picchu!