feb08 Deportivas con placa de carbono

Desde hace unos años, el calzado deportivo se ha visto revolucionado por la aparición de las deportivas con placa de carbono en la entresuela o la media suela. Es difícil situarnos en la línea de salida de una carrera y no estar rodeados de corredores que calcen este tipo innovador de deportivas.

Muchos de vosotros que ya las utilizáis nos comentáis que notáis bastante la diferencia, sentís que los pies os impulsan más hacia delante, pero ¿habéis pensado qué es lo que ocurre cuándo se utiliza placa de carbono? ¿por qué se produce esta especie de ventaja?

A continuación explicamos la particularidad de este tipo de zapatillas y el beneficio que podemos obtener de ellas.

El carbono es un material semirrígido que al aplicarse fuerza o tensión sobre él produce un efecto muelle o “rebote”. Esto quiere decir que cuando el pie se apoya en este material genera una acumulación de energía que se devuelve posteriormente con mayor impulso y rapidez una vez deja de estar apoyado o generando tensión el pie. Por esta razón el pie despega con una mayor velocidad y potencia, produciendo un menor gasto energético.

En definitiva lo que se consigue es una mayor reactividad. Cuando entrenamos la fuerza o la técnica específica de carrera, uno de los aspectos que más trabajamos a la reactividad para conseguir que los tendones que hay en la pierna (en concreto en los tobillos) puedan estar el menor tiempo posible de contacto en el suelo, lo cual reduce el gasto de energía en cada zancada.

Se trata de almacenar de manera óptima la energía que se acumulan en los tendones del gemelo y sóleo, donde la fuerza que se produce al impactar genere una propulsión rápida y potente con el menor gasto de energía posible.

Es por eso que tenemos esa sensación de impulso o de rebote con las deportivas de placa de carbono, porque después de impactar genera una fuerza elástico-explosiva que nos hace despegar con rapidez.

En resumidas cuentas lo que ganamos y el principal beneficio que obtenemos es la economía de carrera, para cada zancada gastaremos menos energía. Es por tanto más recomendable cuando compitamos en pruebas de larga distancia, donde se ha comprobado que en corredores de élite hay calzados con placa de carbono que los pueden hacer un 4% más rápido en maratón.

En caso de corredores amateurs, este tipo de detalles técnicos no son tan determinantes en el resultado final de una prueba, nuestro rendimiento depende más del entrenamiento y de la alimentación que hemos llevado a cabo, eso sí, a medida que una persona acumula años de experiencia o se acerca más a su límite o máximo potencial, entonces sí que conviene acudir a este tipo de recursos para afinar y pulir bien una marca.