jun29 Respuestas al entrenamiento en ambientes cálidos y húmedos

Ahora con la llegada del verano y el calor, una de las mayores preocupaciones es cuándo es el mejor momento para salir a correr o entrenar para que nos afecte lo menos posible al rendimiento el calor y la humedad que encontramos en el ambiente, sobretodo en ciudades con mar como Barcelona, donde una tirada larga en verano puede afectar mucho al resultado y las sensaciones durante el entrenamiento.

En este artículo queremos explicar qué es lo que ocurre en nuestro cuerpo cuando corremos en un ambiente tan adverso y así entenderéis el por qué tenéis sensaciones tan desagradables mientras entrenáis.

Los factores que nos afectan son en su mayoría consecuencia de una deshidratación y podemos encontrar:

  • Incremento de la Frecuencia cardíaca ante una misma intensidad.
  • Disminución del gasto cardíaco y por tanto de la cantidad de oxígeno que enviamos a los músculos.
  • Un incremento en la viscosidad de la sangre.
  • Reducción de la capacidad de eliminación de las sustancias de desecho producto del metabolismo celular.
  • Pérdida de sodio y cloruro alterando el equilibrio hídrico.
  • Empeoramiento del intercambio de calor en la piel.
  • Peor irrigación de la sangre a los músculos activos.
  • Problemas intestinales como consecuencia de una isquemia mesentérica.
  • Aumento de la sensación de esfuerzo

Como podéis comprobar, está más que justificado un descenso del rendimiento en estas condiciones, para evitarlo no sólo hay que escoger una franja horaria adecuada sino a la vez tener en cuenta una serie de consejos; como llevar ropa ligera, de color claro y que sea transpirable, cubrirnos la cabeza con una gorra, buscar lugares con sombra y fuentes para refrescarnos y asegurarnos que podemos hidratarnos con 500 ml aproximadamente de agua por cada hora.

Nos espera un verano duro por delante para preparar todas las competiciones que nos esperan en otoño, así que vamos a intentar combatir de la mejor manera posible a este persistente enemigo.